martes, 23 de octubre de 2012

Pedacitos de sueños

Hoy publico una entrada light, porque la verdad, apenas recuerdo casi nada de lo que me habría gustado publicar, que no era, ni más ni menos que un sueño que he tenido hoy, en el cual con elementos muy sencillos y dispares había una historia preciosa (y me habría gustado poder compartirla con vosotros, pero lo dicho, apenas recuerdo unos pedacitos sueltos), así que simplemente os comentaré como empezaba y cómo terminaba, y dejo a vuestro juicio todo lo demás :)

El sueño comienza con una manada de elefantes caminando por la estepa, en la cual no se puede observar ni un solo arbol, sino al final de camino, y allí es donde se dirigen, con la intención de ponerse la sbotas de forraje. 

Confrme se van acercando, se empieza a vislumbrar una casita de madera, situada entre los árboles; y, al mismo tiempo, el habitante de la casa distingue a los paquidermos en el horizonte, y al momento se decide a talar los árboles que rodean su casa simplemente para intentar que no lleguen hacia él, pues durante años ha estado huyendo de estos elefantes, que, como él, perseguían las pocas zonas que quedaban protegidas con arbolillos y que, al llegar a donde él vivía, siempre abandonaba su hogar, tras ver como en la primera ocasión habían arrasado con todo a su alcance, destrozando incluso su casa en busca de comida. Sin embargo, los elefantes llegan antes de que él termine, y de nuevo le alcanzan, pero en lugar de correr a comerse el forraje o buscar dentro de la casa, uno de los animales llama al hombre y le pide que salga para hablar. Él, con mucha reticencia, termina accediendo, y escucha anonadado como el animal le pide perdón por haber destrozado su casa, y le comenta que llevan años intentando alcanzarle para pedirle disculpas.

A partir de ahí todo comenzaba a volverse bastante imprevisible, y el hombre viajaba con el elefante y salían de aquella estepa alejada de la mano de Dios.

Al final del sueño, el hombre (desconozco si es el mismo hombre, el hijo, o qué,pero podía volar S:) y el elefante terminan corriendo por las calles de una ciudad al estilo mozárabe o algo así, edificios bajos y de techo plano, paredes de tono tostado, calles anchas mientras se ponía el sol, y con ellos corría una mujer, con la cual terminaba casándose el hombre, y a ambos se les veía muy felices, y recuerdo que la parte previa al "casamiento" (no diré boda porque se casaban sobre la marcha en lo alto de una pequeña torrecilla de la ciudad) era preioso, y que me levanté emocionado.

Como colofón final, puedo decir que él le decía a ella que el elefante era uno de los seres má sinteligentes, sino el que más, que había conocido en su vida. Y le pedía por favor que fuese él quien los conviertiese en marido y mujer.

Buenos días a todos :')

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