viernes, 25 de mayo de 2012

Miau!! (un poco sobre mi forma de ver las cosas)

Pues hoy he ido a ver al reumatólogo (La doctora Weruaga, si se escribe así, extremadamente amable ella), sin ninguna razón. A causa de que mi madre, hace unas semans, fue, y de paso la doctora preguntó por mí, supongo que al revisar el expediente familiar o alguna mierda así, a saber, ya que hacía años que no iba a verla.

De pequeño (a eso de los 15 años o así) me diagnosticaron algunas averías crónicas en la espalda, nada grave en principio: Escoliosis, que es una desviación ligera en la columna, bastante frecuente en lso chavales de hoy en día. Cifosis, que es una desviación de una vertebra de la coluna, y lo que ya parecía algo más grave (especialmente en un chaval de mi edad), dos vértebras prácticamente deshidratadas por completo, y dos a medio camino. Dijo que eso se veía en ocasiones, en personas que llevaban toda la vida con algún trabajo duro (carga y descarga, o así), y que tenerlo de tan joven era muy raro, y podía acarrearme problemas en el futuro (a pesar de los dolores crónicos, que esas 3 cosas han ido conllevando toda mi vida : P )

Así que la alternativa era hincharme a natación, o cualquier otra cosa que fortaleciese mi tronco (para descargar la columna en la medida de lo posible), o arriesgarme a sufrir un pinzamiento que limitase mi movimiento, o llegase a capármelo, completamente : P

No hay cosa que más me acojone, así que la alternativa a escojer estaba clara. Desde muy pequeño (bastante más que esto), siempre había nadado mucho, así que no me supuso un cambio en la runita, si bien los dolores (que por aquel entonces eran bastante pronunciados) si molestaban.

Desde más pequeño, las plantas de los pies se me han agrietado mucho mucho, hasta el punto de que ir a la playa o pisar superficies rugosas (o actividad pronunciada, cosa frecuente cuando uno es joven), terminaban causando que sangrase por las plantas de los pies. Doloroso, y poco agradable xD

Esto ha terminado curándose solo, hace ya bastantes años, aunque hace unos días he vuelto a verme agrietadas las plantas de una forma bastante preocupante, pero parece ser que ha remitido.

He tenido algunas otras aflicciones [Acné severo que blablabla>Medicaicón fuerte nazy que a su vez causaba otros problemas (hipersensibilidad a la luz entre ellos, aún tengo alguna remanencia), esguinces varios, hemorragias frecuentes (hereditarias) por la nariz; en una ocasión sangré hasta perder el conocimiento, etc). Vamos, que estoy hecho un pupas, Y TAN JOVEN!! Realmente deberían darme un premio, soy el gordo de las jodiendas, lo se xD

Pues bueno, más recientemente, vengo arrastrando un dolor en los codos, a lo cual el señor médico de cabecera me dijo en 2 ocasiones (después de 2 meses, y después de 3 meses), que era imposible saber qué tenía, y que volviese cuando hubiese algún síntoma más. Unas semanas después, el trumatólogo me echó un ojo (así, por encima, cuestión de 40 segundos tocando) y me dijo sin ligar a dudas que tenía epicondilitis bilateral (codo de tenista) en ambos codos, y me recetó una sesión de fisioterapia.

Por ese entonces, después de algo más de 3 meses con un dolor que fue desde una simple molestia a un dolor agudo, pronunciado y constante, que se había extendido hasta los dedos de ambas manos, fui a buscar algo de informacion por mí mismo (opioniones y experiencias de gente con lo mismo, que siempre suelen tener cierta fiabilidad), y encuentro conque la mayoría muestran una mejoría sustancial, pero no llegan a sanar, ya que después de 3 meses más o menos, la dolencia parece volverse más o menos crónica.

A estas alturas uno no sabe si reír o llorar, así que bueno, los dolores están ya mas que asumidos, pero realmente la preocupación no recae ahí, sino en las molestias reales. Mi ilusión (la única que he tenido siempre clara), era ser escritor. Cuando te tienes que plantear si aún quieres ser escritor sabiendo que probablemente tengas que pasarte el resto de tu vida con dolor en los dedos cada vez que los utilizas, la cosa se vuelve un poco negra. Cuando te das el gusto de desconectar y ponerte a preparar una tarta, y ves que no eres capaz de sostener la sartén sin que te tiemble, que no eres capaz de servir agua en la jarra de la comida, o que no eres capaz de fregar sin que se te escapen los vasos de la mano, entonces todo se vuelve un poco más triste, con vistas al futuro.

Yo me sentí realmente mal cuando rompí un vaso fregando. A pesar de que sabía que no tenía la culpa, y realmente no em sentía culpable, sino impotente. Y entonces piensas ¿Y cómo voy a ser escritor?

Afortunadamente, si bien no voy a sanarme del todo, he mejorado. Espero mejorar algo más, y mantener un achaque más, crónico, como fue lo de la espalda, y aguantar con ello y tirar palante.

Hoy, he ido a ver a la doctora, y le he comentado (no sin cierta preocupación), que últimamente me duelen también los tendones de la rodilla. Me han mandado hacer algunas pruebas, y la verdad, me siento bien.

Me siento bien porque por primera vez un médico se ha parado a verme más de 10 minutos. Me ha preguntado qué deportes hacía (se ha llevado las manos a la cabeza cuando le he dicho que había dejado la natación al empezar la universidad! Aunque se relajó cuando le dije el deporte que aún hacía), mis rutinas, posturas, etc. Y me ha mandado pruebas. Si el primer doctor me hubiese mandado pruebas, a pesar de no haberme diagnosticado nada, quizá hoy no tendría estos problemillas y estas preocupaciones. Quizá no tendría un problema crónico que muchos días me disuade de ponerme a escribir.

O quizá sí. En realidad, no importa tanto. Lo que me caiga, lo superaré, si puedo. Y si no puedo, que no se diga que no le habré puesto ganas, realmente es lo que importa. Más aún. Ahora, si friego, y puedo ponerme un poco de música, y estoy a mis cosas, me siento bien. Por poder hacerlo, simple y llanamente. Por saber que si se me cae un vaso y se me rompe va ser culpa mía, porque soy un desastre y no tengo la cabeza donde tengo. Que voy a sentir culpabilidad, pero no impotencia.

Realmente sienta bien. Me gusta fregar, lo siento si rompo los esquemas de la sociedad xD
Me gusta hacer tonterías de repostería, más incluso que comérmelas (Casi tanto como ver que a los demás les gustan más que a mí).

Me gusta sentirme bien tras hacer deporte (aunque hacer deporte me da una pereza horrible,a estas alturas de la película no os voy a engañar); me gusta cuando me dicen que he escrito algo que no hay por donde cogerlo. Porque puedo arreglarlo, seguir intentándolo, hasta que salga bien, o incluso hasta que me canse.

Y me gustan muchas más cosas, pero sí, primero de todo, me gusta fregar. Y cocinar, sin que se me ciagan las cosas. Y saber que puedo tener unas bases, sobre las que hacer otras cosas que también me gusten.

Y me preocupa lo que puedan decir las pruebas, aunque tampoco es algo que me vaya a quitar el sueño.

Así que, cuando alguien me pregunta "Qué tal la espalda?" o "¿Cómo van esos codos, mejoran?", a pesar de que se que lo hacen con la mejor intención del mundo, no puedo evitar pensar que es una tontería lo que me preguntan, y sonreírme por ello. Me gusta que se preocupen por mí, y realmente lo aprecio.

Pero hay cosas más importantes. Hace poco una persona importante con la que llevaba tiempo sin hablar me comentó que no hay día en que no llore, por algo que le ha sucedido recientemente. Me parece mucho más grave llorar, que tener unos simples dolores físicos. Me parece mucho más importante tener una sonrisa bien colocada que ser capaz de hacer 3 volteretas al aire. Yo no se hacer la voltereta, pero se fregar, y hacer tartitas, y escribir, y mejorar, y sobre todo, sonreír.

Especialmente con las cosas pequeñas, porque al fin y al cabo, son las que forman todo lo demás.

Por eso, a pesar de todo, de ser un pupas, me considero afortunado y soy bastante feliz, porque creo que se apreciar algunas de las muchas cosas que merecen la pena :')


Carlos Garrido

EDIT: Y os voy a dejar una canción que me hace sonreír.
http://www.youtube.com/watch?v=2Fy8P1MVfsQ